Nuestra materia prima de plástico de PVC está hecha en un 57 % de sal y un 43 % de aceite que, a través de procesos químicos, forma un polímero. El resultado es un plástico sostenible que está exento de sustancias químicas nocivas como ftalatos y metales pesados. El uso de sal requiere una materia prima fósil significativamente menor en comparación con otros plásticos. La estructura única del polímero también hace que el PVC sea 100 % reciclable varias veces después de su larga vida útil.

La composición de nuestros suelos consiste en un 39 % carbonato cálcico, un 37 % de PVC, un 18 % de plastificantes, un 2 % de fibra de vidrio, un 2 % de estabilizadores y un 1 % de pigmento. Desde una perspectiva fósil, esto significa que los suelos contienen un 33 % de materia prima fósil que procede de plastificantes y PVC y que el 67 % restante de los suelos contiene material inorgánico. Del material inorgánico, la mayoría son sales de las que hay abundantes recursos en la corteza terrestre.

Solo compramos nuestro polímero a fabricantes de vinilo que cumplan los requisitos de Best Environmental Practice PVC. Las fábricas participantes son energéticamente eficientes y tienen pequeñas emisiones durante la producción.